
¿Qué te parece si exploramos 2 recetas de postres con leche que deleitarán tus sentidos? Sí, sí, postres rápidos y deliciosos, llenos de sabor. Además, no queremos meter presión (eso nunca) pero la Navidad está a la vuelta de la esquina e ir con un postres tradicional e irresistible, siempre es una buena opción. ¿Vamos al lío? ¡Siiii!
Leche en la repostería: un secreto de sabor
Antes de empezar, ¿te has preguntado alguna vez por qué la leche es un ingrediente tan relevante en las recetas de repostería? La leche de vaca ayuda a que los ingredientes que van al horno consigan dorarse, por ejemplo los hojaldres o las galletas. En cambio, en la elaboración de pan, la leche contribuye a la textura suave y a mantener la calidad del pan. ¿Y aporta algo a ese toque dulce de la repostería? Claro que sí, la lactosa, una de las principales proteínas de la leche de vaca, aporta dulzura a los productos horneados. Por no hablar de que añadir leche en la elaboración de postres irresistibles es una forma de agregar calcio a tu dieta. Ahora sí, tras esta clase magistral sobre el uso de leche en repostería vamos con:
Dos postres con leche que hacen la diferencia.
Postre irresistible: leche frita.

La leche frita es un postre tradicional gallego y uno de los que más éxito. Una receta cremosa y con un sabor único. Necesitas:
- 1 litro de leche entera Celta 🙂
- 120 gr de azúcar
- 120 gr de maicena
- 1 piel de limón
- 1 piel de naranja
- 1 cucharadita de vainilla
- 1 ramita de canela
- Para el rebozado:
- 3 huevos
- 50 gr de harina
- Aceite para freír
- Azúcar para rebozar
– Corta unas pieles de naranja y de limón.
– Reserva un vaso de leche en la nevera, el resto al cazo. Añade las pieles de limón y naranja, la ramita de canela, y el azúcar.
– Cuando empiece a hervir, baja el fuego y aguanta 10 minutos y retira.
– Añade la maicena a la leche que habías reservado y remueve hasta que quede bien disuelta e incorpora la vainilla.
– Cuela toda la leche frita en otro cazo y añade la leche en la que has disuelto la maicena. Mezcla bien y llévala al fuego para que espese sin dejar de remover.
– Cuando obtengas una textura cremosa, retira el cazo del fuego.
– Vierte la mezcla en una bandeja de plástico para que se enfríe y cúbrela con un film de cocina para evitar que se haga costra.
– Deja en el frigo toooda la noche.
– Corta las porciones con cuidado, reboza con huevo batido y harina y ¡a freír!
– Reboza con azúcar y ¡a disfrutar!
Otro postre irresistible con leche: torrijas.

Hay quién dice que este postre irresistible es solo para Semana Santa pero… ¡no debería ser así estando tan bueno! 🙂 Para su elaboración necesitas:
- 1 barra de pan (del día o duro)
- 600 ml. de leche Celta (entera, semi o desnatada, la que prefieras)
- 3 huevos
- Canela en polvo
- Canela en rama
- 100 gr de azúcar
- Aceite de oliva.
– Hierve la leche en un cazo con 2 ramas de canela y el azúcar hasta que llegue a ebullición y retira en un plato hondo.
– Corta el pan en rebanadas.
– Empapa en la leche las rebanadas de pan.
– Prepara otro plato hondo y batimos los tres huevos.
– Calienta el aceite en la sartén y que empiece el baile de torrijas: empapa, moja en el huevo y ¡a la sartén!
– Una vez tostadas, las sacamos a un plato con papel de cocina para que escurra el resto del aceite.
– Añade canela o azúcar al gusto.
Cocina, disfruta, saborea y disfruta muuuu’cho del Milkfulness cada día.